jueves, 21 de marzo de 2013

CON TRUBIA, ARMADOS DE RAZONES


La manifestación celebrada el pasado miércoles por las calles de Oviedo, convocada por diferentes asociaciones vecinales y de comerciantes de Trubia en defensa de los trabajadores de su fábrica de armas y en contra del expediente de regulación de empleo (ERE) que se pretende acometer después de haber cerrado la fábrica de La Vega de Oviedo, contó con la presencia de una treintena de activistas social-patriotas en su mayoría jóvenes, estudiantes y desempleados que acudimos a solidarizarnos con los trabajadores afectados y con sus familias y vecinos, mostrando una vez más que el patriotismo o es Social o no lo es y se convierte en patrioterismo de derechas, de la misma forma que si a la causa social se la separa de la Nacional se desvirtúa de la forma que hacen las izquierdas.

Desde estas líneas queremos felicitar y agradecer a los convocantes que mantuvieran la justa reivindicación sin permitir que ningún grupo político ni sindicato tuviese protagonismo en la misma, e impidiendo que un pequeño grupo de extrema izquierda ondease unos trapos rojos con la hoz y el martillo con intereses partidistas y provocadores alejados totalmente de la convocatoria.

Nuestra marcha, tras unas pancartas con los lemas: “Políticos al paro” y “ERE no” transcurrió con total normalidad, despertando la curiosidad y simpatías de la mayoría de los manifestantes; en otras ocasiones que hemos acudido a manifestaciones de carácter, presuntamente, “ciudadanas” nos hemos encontrado con que éstas tratan de ser monopolizadas por elementos de extrema izquierda que sitúan su ideología partidista por encima del lema de la manifestación, como ocurrió el pasado 16 de febrero en Gijón en la manifestación contra los desahucios donde fuimos increpados e insultados, aguantando intentos de agresión de estos colectivos intolerantes.


Por lo que de nuevo reiteramos nuestro agradecimiento y felicitaciones a los organizadores así como les mostramos nuestra plena solidaridad en defensa de los trabajadores de la fábrica de armas de Trubia, sabiendo que pueden contar con todo nuestro apoyo. La Justicia Social que propugnamos los patriotas está por encima de ideologías, nuestra Causa está con el Pueblo y la Nación; son “otros” los demagogos e intolerantes, nosotros si señalamos a los auténticos culpables de la crisis y la miseria en que nos han sumido a los honrados asturianos y españoles, en general, los políticos y banqueros con la complicidad de los sindicatos subvencionados.

miércoles, 20 de marzo de 2013

FRENTE A LA CRIMINALIZACIÓN DE NUESTRAS IDEAS

 
El pasado sábado 16 de marzo, tuvo lugar en Gijón el acto anunciado bajo el lema: Frente a la criminalización del patriotismo social y en defensa de nuestros presos.

Convocados por esta Causa que debiera unirnos a todos, sin exclusión de siglas y sensibilidades ideológicas y por ser una cuestión que nos afecta a todos sin protagonismos publicitarios de ningún tipo (agradecer desde aquí la publicidad de los “tolerantes” de siempre del conglomerado ultra-izquierdista que con sus amenazas más o menos veladas nos volvieron a hacer un favor en el éxito de la convocatoria) nos reunimos en una céntrica plaza gijonesa alrededor de un centenar de militantes de diversas asociaciones, colectivos y partidos.
Pese a la lluvia (mala señal sería que unas gotas nos echasen para atrás cuando nos estamos jugando tanto), se pudo montar el equipo de sonido y el sencillo escenario desde donde tomaron la palabra varios camaradas que con vibrantes discursos convirtieron sus palabras en una arenga común frente a la criminalización de nuestras ideas, perseguidas con saña desde todo el espectro político del Sistema desde la derecha a la izquierda (y ambos extremos), satanizados por los medios de manipulación que con su poder sólo dan apoyo a la casta corrupta de los políticos y a la casta usurera de la banca, tergiversando nuestro mensaje de Tercera Posición, auténticamente Social, Nacional y Revolucionario.

Dos pancartas tras las que se posicionaron los asistentes que rezaban: “Menos presos políticos, más políticos presos” y “Las rejas no callan la Verdad”, junto a las banderas que mantendremos alzadas siempre, pese a quien pese, despertaron la curiosidad de las personas que se pararon a escuchar los  discursos, y a las que se les entregaban unas octavillas diseñadas para la ocasión que explicaban nuestra presencia en las calles.
El acto se prolongó durante cerca de dos horas, finalizando el mismo con la promesa de no dejar las calles hasta conquistarlas, pese a la represión y convencidos que es en la calle donde debemos estar para defender a nuestro Pueblo y a nuestra Nación, reivindicando lo que consideremos una obligación moral en defensa de la Justicia Social y de nuestra Identidad, sin ningún tipo de complejo ideológico y con el afán de seguir luchando y demostrando que la Unidad de Acción es posible más allá de las siglas.


Leer discursos AQUÍ Blog de ANR

jueves, 7 de marzo de 2013

FRENTE A LA MANIPULACIÓN

Texto publicado en el diario El Comercio

NINGÚN ESPAÑOL SIN TECHO

Al Sr. Director del diario El Comercio:

En nombre del grupo formado por jóvenes, estudiantes, parados, obreros y autónomos que el pasado sábado 16 de febrero acudieron a adherirse a la manifestación convocada por la Plataforma de afectados por la hipoteca (PAH) portando una pancarta cuyo lema era: “Ningún español sin techo”, queremos aclarar que:

• En principio, al llegar a la manifestación los propios organizadores de la PAH nos indicaron el lugar donde nos podíamos situar con nuestra pancarta, indicaciones que seguimos con total naturalidad.
• Varios manifestantes nos pidieron permiso para portar y marchar tras nuestra pancarta puesto que asumían perfectamente el lema de la misma.
• Elementos aislados con simbología de izquierda y extrema izquierda comenzaron a gritar: “nazis fuera”, mientras señalaban amenazantes a nuestro grupo y a todas las personas que en principio se habían unido a nosotros coreando el único eslogan que salió de nuestras gargantas: “Banqueros usureros”, perfectamente acorde (pensábamos) con la convocatoria de la manifestación.
• A los gritos amenazantes a los que se unió cada vez un mayor número de los allí presentes animados por la megafonía de los organizadores, nuestro grupo trató de mostrar la mayor de las indiferencias puesto que habíamos acudido a manifestarnos para mostrar nuestro malestar y oposición a los desahucios, la política del gobierno y el terrorismo financiero.
• Ante las amenazas, insultos e intentos de agresión (que aguantamos estoicamente), tratando de razonar con los organizadores y radicales izquierdistas que nos rodeaba y que pretendían arrancarnos nuestra pancarta sin conseguirlo al grito de “Vosotros fascistas sois los terroristas”, nosotros seguimos reivindicando nuestro derecho a continuar en la manifestación a pesar del acoso físico y violento creciente, llegando a utilizar los palos de sus banderas para agredirnos.
• La policía permitió durante demasiado tiempo esta situación de tensión sin intervenir, y que cuando lo hizo, a cargo de los antidisturbios de la UIP, se dirigieron a nosotros para indicarnos que si no abandonábamos la manifestación seríamos denunciados por “atentar contra el orden público y por “provocar” (?).
• Pese a los inconsistentes argumentos utilizados por el jefe de la intervención policial, jaleado con aplausos por los organizadores y gran parte de los asistentes a la manifestación, y debido a que cargaron contra nosotros, abandonamos el lugar para situarnos en la plaza contigua del Humedal intentando desplegar de nuevo la pancarta, lo cual fue impedido por la policía.
• Todo lo aquí explicado, demuestra nuestras intenciones al acudir a la manifestación, con lo cual exigimos el derecho a réplica y rectificación al periódico que usted dirige que con titulares sensacionalistas cargados de morbo social escribe: “Un grupo de neonazis se intenta colar en la manifestación…”, hablando de una supuesta “simbología nazi”, así como haciéndose eco, en su edición digital, de un video casero grabado y posteriormente manipulado, ocultando interesadamente los insultos, y amenazas lanzados por organizadores y miembros de la extrema izquierda, y los intentos de agresión que sufrimos sin responder a esas provocaciones.
• Queda más que latente y se corrobora con todo ello, y en especial, que la mayor parte de los “movimientos ciudadanos” como esta “plataforma” están formados por elementos de la izquierda más intolerante y violenta que se creen con el monopolio de las protestas sociales de todo tipo para seguir manteniendo sus propios intereses partidistas y sus subvenciones. Poniendo de manifiesto su total falta de sentido común y coherencia, que insultan de la manera más vulgar y sin argumentos dialécticos de ningún tipo más que los típicos y tópicos prejuicios ideológicos para discriminar y criminalizar opciones ideológicas no acordes a su sectarismo, que como los portadores de la pancarta, exigían el derecho para todos los españoles a tener una vivienda digna.
• Se comprobó que nuestro grupo fuimos los únicos que de manera auténtica mostramos nuestro descontento y oposición a los verdaderos culpables de la crisis y sus cómplices, aquellos que como la PAH “olvida” contra quién fueron a manifestarse, volcándose en tratar de expulsar a un grupo de personas que exigían sólo lo que rezaba la pancarta: “un techo para todos los españoles”, y mientras aplaudía a la misma policía que ejecuta esos desahucios contra los que supuestamente habían convocado esa manifestación.

Quedamos a su disposición para aclararle cualquier duda que le pueda quedar al respecto, agradeciéndole de antemano la rectificación de la noticia atendiendo a nuestro derecho a réplica.

sábado, 2 de marzo de 2013

ERA UN NIÑO BLANCO


* Uno de los más de 500 carteles que se han imprimido gracias a la ayuda de un camarada de Gijón y que se han empezado a colocar en las inmediaciones de los colegios asturianos, grandes superficies comerciales, estaciones de autobuses, trenes,...


Aaron Dugmore tenía nueve años. Se quitó la vida porque no podía soportar el acoso de sus compañeros de colegio. Diríase el típico caso de acoso escolar que suele abrir de vez en cuando los telediarios. Y sin embargo ninguna de las cadenas de televisión que diariamente nos intoxican y manipulan con su sensacionalismo dedicó un solo minuto a la muerte de Aaron. Y es que da la casualidad de que Aaron era un chaval blanco en un barrio dominado por inmigrantes. Uno de esos barrios europeos cada vez más numerosos en los que ser blanco es un factor de riesgo.
Aaron era acosado por ser blanco. A sus nueve años sabía muy bien lo que era sentirse extranjero en su patria. Sabía lo que era ser insultado y humillado en la tierra de sus antepasados por especímenes venidos de fuera de Europa.
 
Pero los culpables de la muerte de Aaron no son solamente los pandilleros moros, negros o indios que lo amenazaban y humillaban. Los verdaderos culpables se ocultan en las mismas covachas y sanedrines que han impuesto ahora la consigna del silencio. Los auténticos asesinos del pequeño Aaron son esos profesores de la caterva progre que intoxican las mentes de nuestros escolares con sus "educaciones para la ciudadanía" y demás basura conceptual. Son esos acomplejados voceros del multiculturalismo que equiparan una Ópera de Mozart o un concierto de Falla con el aporreo de un tam-tam africano o con los silbidos de una flauta amerindia. Los que hacen que niños españoles, ingleses, alemanes o italianos se sientan avergonzados de ser blancos, europeos y heterosexuales. Son los guionistas de esas teleseries en las que siempre el negro, el judío o el marica son personajes inteligentes y simpáticos mientras que la familia normal, lo que la cursilería progre denomina "familia tradicional", es presentada como algo anacrónico o antipático. Son esos publicistas políticamente correctos que para anunciar algún producto infantil siempre muestran una heterogénea mezcla multicultural de bebés negros, chinos o moros en las que, ocasionalmente, aparece algún niño blanco. Son los estebanibarras y demás sabandijas subvencionadas que hubieran chillado histéricamente si Aaron hubiera sido negro.

*Reparto de octavillas de denuncia del racismo anti-blanco
Son los periodistas mendaces que silencian su muerte. Los obedientes plumíferos que hubieran dedicado horas enteras de reportajes a esta muerte si Aaron, en lugar de una víctima del racismo antiblanco políticamente correcto, hubiera sido un violador negro apaleado por malvados neonazis, o una niña mora "discriminada" porque en su colegio no le permiten ir con burka.
Pero Aaron era blanco y la consigna judeoprogre es silenciar su muerte como se silencian las de los granjeros blancos asesinados en Sudáfrica por hordas de negros o como se silencian las violaciones de españolas por marroquíes o por sudamericanos. Son crímenes realmente molestos para el rebaño amanerado y buenista de esa izquierda-caviar que desde hace décadas es el árbitro inapelable de la corrección política.

La piara hipócrita que condena el racismo excepto cuando se trata de racismo antiblanco. Los hijos de puta.